
Un relato distópico donde ser diferente es delito, y el fanatismo se disfraza de tradición. Ajedrez, té y una redada que lo cambia todo. ¿Hasta dónde hemos llegado? #ficción #distopía #relato
En un país donde los ojos azules son motivo de sospecha y el boletín de hispanidad es obligatorio, Marcos encuentra un pequeño refugio lejos del ruido, del odio y del miedo. Pero incluso los lugares seguros tienen grietas cuando el fanatismo se institucionaliza. En este relato distópico —no tan lejano a ciertas realidades— exploramos la represión disfrazada de tradición, la normalización del fascismo y el valor silencioso de resistir.
Un ajedrez, una taza de té, una redada. Todo cabe en este retrato inquietante de una España donde ser diferente es un delito.